VÉRTIGO Y DESEQUILIBRIO - VÉRTIGO Y MAREO
No es una enfermedad, es un síntoma, que aparece en algunas alteraciones o enfermedades del oído interno (sistema vestibular del oído interno) y excepcionalmente del sistema nervioso central ( cerebro).
Consiste en la sensación subjetiva de movimiento, que se puede manifestar como una especie de balanceo, rotatorio o de desplazamiento, propio o de las cosas que nos rodean, sin que estos movimientos ocurran realmente.
El vértigo se suele acompañar de desequilibrio, sudoración fría, náuseas y vómitos.
Aunque se suele hablar indistintamente de vértigo y de mareo ,el vértigo hace referencia siempre a una alteración del sistema vestibular (alojado en el oído interno ), mientras que el mareo es un trastorno del equilibrio no siempre relacionado con dicho sistema, muchas veces es de tipo tensional o vascular.
Frecuentemente se confunde la palabra vértigo del oído interno con el vértigo de altura, pero son síntomas distintos y tienen causas diferentes. También se confunde con otros síntomas como las lipotimias, sensación de cabeza hueca, sensación de andar entre nubes, inestabilidad, etc., todos ellos de origen y significado desigual; por ejemplo, en alteraciones vasculares, visuales, en el sistema nervioso central o de origen psicológico.
Causas más importantes del vértigo de oído:
• el Vértigo Posicional Paroxístico Benigno (VPPB),
• la enfermedad de Ménière,
• las infecciones del oído interno o laberintitis,
• patologías de tipo vascular que afectan al órgano del equilibrio
• tumores del oído interno y del nervio auditivo-vestibular.
Tratamiento
a) Farmacológico,
Prescribiendo fármacos de tipo sedante vestibular durante las crisis y tratamiento farmacológico para mejorar la causa que lo provoca en las intercrisis.
b) Rehabilitación vestibular del equilibrio
Es un tratamiento basado en una serie de ejercicios para resolver el vértigo, mareo e inestabilidad, para reducir estos síntomas y mejorar la calidad de vida.
c) Tratamientos intratimpánicos con Corticoide o con Gentamicina
Tras anestesia local, ambos fármacos se inyectan al oído interno a través del tímpano .En ocasiones se coloca un tubo transtimpánico para aplicar a través del mismo el fármaco.
Los Corticoides son útiles en casos de sordera sobre todo de origen inmunológico, sordera súbita, acúfenos y en trastornos del equilibrio del oído interno.
Por el contrario, la Gentamicina tiene por finalidad mejorar o erradicar el vértigo incapacitante en la enfermedad de Ménière.
d) Maniobra de reposición de partículas o de Epley para el VPPB
Se trata de una serie de movimientos a los que se somete al paciente haciendo que unas partículas del oído interno conocidas como otolitos vuelvan a la posición correcta.
La mejoría respecto al vértigo es significativa después de este tratamiento en más del 80% de los casos.
En ocasiones es necesario repetirla, si el paciente presenta nuevamente episodios de vértigo posicional, o realizar otro tipo de maniobras como la de Semont o ejercicios de Brandt y Daroff.